Durante la era de los intereses negativos y la pandemia los bancos fueron acumulando una gran cantidad de bonos a muy bajo interés, estos bonos fueron comprados sobre todo durante los estímulos de liquidez que los bancos centrales fueron realizando para estimular la economía una vez terminada la pandemia.
Cuando se produjo el gran aumento de la inflación en 2022 los bancos centrales aumentaron los tipos de interés y esto a su vez provoco que los intereses de los bonos subieran como la espuma, al subir estos intereses el valor de los bonos comprados antes de 2022 cayo en picado, ya que nadie esta interesado en bonos con interés 0% o 0,5% pudiendo comprar bonos al 4%.
Ahora los bancos están llenos de estos bonos basura de muy bajo interese y que nadie quiere, mientras el banco no venda los bonos no hay problema ya que se sigue manteniendo su valor, el problema viene si el banco necesita liquidez y tiene que acudir al mercado a vender sus bonos, entonces esos bonos perderían el 50% de su valor lo cual provocaría corridas de depósitos entre los cliente del banco por temor a una quiebra.